Cada vez son más los alumnos que por iniciativa propia se hacen con una flauta dulce de madera. Tienen una calidad de sonido mejor y la calidez de la madera la diferencia de la frialdad del plástico. Por contra estas flautas necesitan unos cuidados añadidos. Al principio hay que tocarla con precaución para que la madera se vaya acostumbrando poco a poco a la humedad y hay que engrasarle las piezas de vez en cuando.
Desde la clase de música nos sentimos muy orgullosos cuando un alumno se interesa por este instrumento cuyo precio varía entre 20 y 60 euros dependiendo del modelo y marca. Bastante barato si lo comparamos con cualquier otro instrumento. Es importantísimo que a la hora de adquirirla elijamos una que tenga digitación alemana y no barroca, ya que las posiciones de algunas notas cambian. Lo mejor es pedir consejo al profesor.
Aquí tenemos a Lucas y Einar posando orgullosos con su nueva adquisición. Estamos seguros de que disfrutarán mucho tiempo al lado de su nueva compañera. Enhorabuena.
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